El detective Hércules Poirot acaba de pasar varios días en Siria. Después de un viaje largo en Simplon-Orient-Express, se hace al hotel Tokatlian, en el Bósforo. Mientras que esté a punto de pasar allí algunos días, recibe un telegrama al que ordena él volver a Londres para un asunto de gran importancia. Manda entonces un billete de tren, pero todos los sitios son reservados. Muy asombrado por este fenómeno, Poirot tiene éxito sin embargo obtener un sitio gracias a un viejo amigo. El detective está a punto pues de pasar varios días en este tren famoso para volver a Londres, en el cual podrá apreciar los placeres y el lujo viajes ferroviarios, totalmente como sufrir los inconvenientes que emanan de eso. Pero una noche se revela muy agitada. En efecto, las nieves yugoslavas forzaron Oriente-expreso de pararse. Además, al día siguiente por la mañana, descubrimos el cadáver de un estadounidense mechado por doce cuchilladas. Esta nueva intriga todos los pasajeros. Le confiamos rápidamente el asunto a Poirot. El asunto va a revelarse apasionante para el detective belga porque el asesino no pudo intervenir del exterior.
El "Murder on the Orient-Express" es, de lejos, una de las novelas las más acertadas y mejor escritas por la novelista inglesa, y también uno de los más apreciados por los lectores. Agatha Christie llegó en efecto a concebir una historia admirablemente bien cosida. En primer lugar, el cebo(principio) de la novela es de una gran ingeniosidad porque el lector es muy rápidamente impregnado la historia.
El "Murder on the Orient-Express" es, de lejos, una de las novelas las más acertadas y mejor escritas por la novelista inglesa, y también uno de los más apreciados por los lectores. Agatha Christie llegó en efecto a concebir una historia admirablemente bien cosida. En primer lugar, el cebo(principio) de la novela es de una gran ingeniosidad porque el lector es muy rápidamente impregnado la historia.